Juicio por la Verdad
“Tengo dudas de que hayan existido centros clandestinos de detención como los denuncian. A mí no me consta”.
Palabras vertidas en la audiencia por el Dr. Gualberto Mostajo, ex funcionario del gobierno de la Provincia de Buenos Aires durante la gobernación del General Ibérico Saint Jean.
Por Secretaría Jurídica
LA PLATA (23Noviembre2006).- Pasadas las 20.30 horas finalizaron las audiencias de ayer sobre el secuestro y posterior desaparición de Antonio Bettini y varios integrantes de su familia.
Quien fuera Asesor General de Gobierno entre abril de 1976 y septiembre de 1979, Gualberto Mostajo, reconoció haber realizado gestiones a pedido del Embajador de Francia sobre el destino de la Sra. Mercedes Hourquebie de Francese, suegra del doctor Bettini, quien fue secuestrada en Noviembre de 1977. Admitió haberse reunido en busca de noticias con el Coronel Camps, jefe de policía durante la dictadura cívico militar, obteniendo como respuesta que la policía de la Provincia no había participado en ese procedimiento.
Negó haber sido apoderado de Dora Francese de Trozzo en la sucesión de Mercedes Hourquebie, pero reconoció haber sido designado administrador de los bienes.
El abogado del actual embajador argentino en España Carlos Bettini, Dr. Esteban Paredes, acompañó copia de un poder otorgado al testigo, cuyo original obra en un juzgado civil y comercial de nuestra ciudad.
Aunque Mostajo insisitió en desconocer la existencia de ese poder y al escribano actuante, sí admitió que los otros dos letrados que figuran son de su conocimiento, dado que uno de ellos compartía con él su estudio jurídico.
Ante esta situación el Ministerio Público Fiscal solicitó copia del acta de la declaración a fin de analizar la supuesta comisión de ilícito.
Mostajo afirmó enérgicamente desconocer que la señora de Francese hubiera sido secuestrada: "sólo sabía que estaba desaparecida"; asimismo dijo dudar de la existencia de centros clandestinos de detención, ya que a él no le constaban.
Brindó también su testimonio Dalmiro Cosoli, quien trabajaba en la armería de calle 54 entre 8 y 9 y que conocía a la señora Mercedes Francese por su chofer, con quien se había criado, y por esta amistad concurrían al campo de la familia Bettini en la época de caza.
Dijo que concurría gente perteneciente a las fuerzas de seguridad al negocio pero que él no recuerda haber hecho ninguna gestión por la familia Bettini; quizás sí sus hermanos, pero ambos han fallecido.
A continuación se recibió el testimonio del Dr. Vicente Bustos, quien fuera asesor de la Secretaría de Justicia del Ministerio de Gobierno, siendo su superior el Ministro Jaime Smart.
A pesar de haber admitido una amistad personal con el hoy embajador Carlos Bettini, hijo del ex fiscal, dijo no haber realizado ninguna gestión en busca de su familia; asimismo aseveró que su hermano fue detenido por unas horas y torturado, por la amistad que los unía con Carlos. “Suponíamos que estaba en montoneros y que nos podía pasar algo a nosotros”
Negó haber podido hacer gestiones por la desaparición de personas, aún en el caso de su hermano.
Siguiendo con los testimonios de funcionarios de gobierno se citó a Juan María Torino quien ocupara el cargo de subsecretario en el Ministerio de Gobierno desde abril de 1976 a marzo de 1979. El ex funcionario de la dictadura aseguró no conocer a la familia Francese –Bettini, pero sí haber conocido sobre su desaparición a través de los medios. Negó haber realizado gestiones sobre el destino de ningún desaparecido, ya que no era la persona encargada de recibir esas denuncias, y que aún teniendo a su prima desaparecida no logró realizar búsquedas a través de su gestión gubernamental.
Asimismo los marinos Héctor Tebaldi y Rescio Jorge, ambos pertenecientes a la Armada Argentina, dijeron desconocer las circunstancias de la desaparición del teniente Jorge Devoto, yerno de Antonio Bettini, quien entró al edificio Libertad a realizar gestiones por su suegro y no fue visto nunca más. Tebaldi dijo conocer a Adolfo Scilingo, quien declaró ante el Juez Baltasar Garzón y fue condenado por la Audiencia Naconal de España, pero desconoció la existencia de vuelos de la muerte denunciados por Scilingo ante la justicia de aquel país.
En otro orden (y por segunda vez en este juicio) se tomó declaración testimonial al Comisario Mayor retirado de la Policía Federal Juan Pochelou, quien declarara con anterioridad con relación al caso Mariani. En lo que a la familia Bettini respecta, Pochelou había ayudado a Antonio Bettini a recuperar el cuerpo de su hijo Marcelo Gabriel, asesinado en noviembre de 1976, pero nada aportó acerca de cómo le llegaron a él los datos de dónde se encontraba el cuerpo y que fuerzas habrían actuado. Aunque si afirmó haber tratado de buscar rastros a través de sus informantes.
Por último se presentó el coronel retirado del ejército y licenciado en ciencias de la información, Alejandro Arias Duval, quien había sido citado a prestar declaración informativa. Acompañado por su letrado patrocinante, el Dr. Omar Giletta, Arias Duval se negó a declarar amparándose en el art. 18 de la Constitución Nacional.
Arias Duval está imputado por un centenar de crímenes durante la dictadura militar en la Argentina. La justicia le adjudica 101 casos de privación ilegal de la libertad y torturas cometidos en el centro clandestino de detención que funcionaba en la comisaría quinta de La Plata en esa época, y se encuentra en la fecha con arresto domiciliario por orden del juez federal platense Arnaldo Corazza,
Se lo acusa de ser responsable por el importante papel que desarrolló en la cadena de mandos que instrumentó la represión ilegal en la ciudad de La Plata. Arias Duval conducía el Destacamento de Inteligencia 101, que dependía del Séptimo Regimiento del Ejército.
Participaron de las audiencias del día de hoy los camaristas Alberto Ramón Durán, Julio Víctor Reboredo y Carlos Román Compaired; por el Ministerio Público Fiscal Carlos Dulau Dumm y Marcelo Molina, por el Ministerio Público de la Defensa Jorge Cozzi; en representación de la Asociación Abuelas de Plazo de Mayo el Dr. Emanuel Lovelli, por la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos La Plata la Dra. Alicia Peralta.y en representación de la familia Bettini el Dr. Carlos Bettini y su letrado el Dr. Esteban Paredes.