Miércoles 20 de Agosto de 2003

Informe de Prensa de la APDH La Plata - Juicio por la Verdad

 

 

Reconocen a Lavallén como el jefe de la tortura en San Justo
Un sobreviviente identificó a Rubén Luis Lavallén como el que dirigía las sesiones de tortura con picana. "Denle más, denle menos", recordó que decía el represor a sus subordinados.


Por Lucas Miguel (Secretaría de Prensa) 

 

LA PLATA (20ago03).- El sobreviviente José Eduardo Moreno identificó hoy en una fotografía al ex comisario Rubén Luis Lavallén como el represor que dirigió la sesión de tortura que sufrió en el centro clandestino de la Brigada de Investigaciones de San Justo.

Cuando los jueces Julio Reboredo y Antonio Pacilio le exhibieron la foto de Lavallén, Moreno dijo: "Yo creo que sí". Y les preguntó: "¿Qué grado tenía? Porque recuerdo que tenía poder de mando sobre el resto". La secretaria del tribunal contestó que Lavallén era el comisario.

Más tarde, en diálogo con la Secretaría de Prensa de APDH La Plata, Moreno recordó que cuando lo picanearon sobre un colchón mojado "él no torturaba. Les decía a los otros 'denle más, denle menos'". Señaló que durante los tormentos los represores escuchaban un partido de fútbol entre Boca Juniors y Palmeiras. "Duró tanto que escuché hasta la repetición de los goles", dijo.

Moreno también le contó a esta Secretaría que Lavallén dirigió el operativo en el que lo secuestraron junto a su padre, Antonio Domingo, y su tío, José, -ambos también declararon hoy- y la señora María Elena Iannotti, el 14 de septiembre de 1977 en Merlo, provincia de Buenos Aires.

José Eduardo Moreno declaró hoy que sólo pudo reconocer las caras de dos represores: "Uno gordo, que lo recuerdo porque era parecido a un cliente de la carpintería de mi viejo. El otro, ese (por Lavallén), que lo reconocí en la televisión, en una entrevista que le hizo canal 9 en el año '83. El tipo lloraba porque lo acusaban de haberse apropiado de un hijo de desaparecidos y decía que no era culpable. Lo vi de casualidad, haciendo zapping".

Moreno se enteró hoy que Lavallén fue condenado en 1988 por la apropiación de Paula Logares, la hija de los desaparecidos Mónica Grispón y Claudio Logares, secuestrados en Montevideo, Uruguay, el 18 de mayo de 1978 y vistos por última vez en la Brigada de San Justo. Elsa Pavón, la abuela de Paula, se lo contó cuando terminó de declarar.

La desaparición del matrimonio, de la que está imputado Lavallén, está siendo investigada en la justicia federal de Lomas de Zamora, jurisdicción de la Cámara Federal de La Plata.

No es la primera vez que un testigo reconoce a Lavallén. El 26 de marzo pasado Graciela Beatriz Velásquez, esposa del obrero de Mercedes Benz desaparecido, Alberto Gigena, lo reconoció entre los secuestradores de su marido.

Mercedes Benz y Lavallén tienen puntos en común: varios de los obreros secuestrados estuvieron detenidos en la Brigada de San Justo, mientras la comandaba el represor, quien en 1978 fue contratado como jefe de Seguridad de la empresa.

José Eduardo Moreno, su padre Antonio Domingo y su tío José declararon que fueron secuestrados el 14 de septiembre de 1977 en la carpintería que la familia tiene en Merlo.

El secuestro se produjo luego de que los represores detuvieran a Jorge Quiroga, un ex empleado de la carpintería que militaba en Montoneros, dijo Antonio. El muchacho les había pedido de favor que le permitieran construir una mesita ratona con doble fondo, "para guardar documentos y dinero". "Un día fue un cliente, vio cuando la hacían, y me pidió otra igual. No le llevé el apunte, pero se la hizo mi hijo, que además se hizo otra para él porque le gustó. El asunto es que las mesas que empezó mi hijo nunca se terminaron y quedaron ahí, a medio hacer", relató Antonio. "Y cuando lo agarran a Quiroga, les dice (a los represores) que la mesa la hizo en mi carpintería. Cuando vienen estos hombres, encuentran los restos de las mesas sin hacer. Pero todo se complicó porque la señora (María Elena Iannotti) de Gambero, que había ido a preguntar por unos muebles, llevaba con ella un periódico del Partido Comunista".Así fue como se llevaron a los Moreno y a Iannotti, tesorera del PC de Merlo que aún está desaparecida. Todos fueron llevados a la Brigada de San Justo, donde fueron torturados. José Moreno recordó que les había pedido a los represores: "Péguenme un tiro porque no aguanto más". Allí se encontraron con otros detenidos, entre ellos el desaparecido Jorge Catanese, quien hacía el personaje del luchador "Yolanka" en el programa televisivo "Titanes en el Ring".

Luego de diez días en San Justo, todos fueron trasladados al "Pozo de Banfield", donde estuvieron quince días. Ahí los Moreno vieron a Iannotti por última vez. Después los trasladaron a la comisaría 3° de Valentín Alsina, donde fueron liberados al cabo de otros quince días.



"Repartieron los bebés como gatitos"

Hoy también declaró María Isabel "Chicha" Chorobik de Mariani, quien se presentó espontáneamente en el caso que investiga la desaparición de Violeta Graciela Ortolani, ocurrida el 14 de diciembre de 1976. Ortolani estaba embarazada de siete meses.

Chorobik declaró que el 25 de octubre de 1991 inició una causa ante el juez Alberto Durán (hoy camarista) porque obtuvo información sobre un presunto apropiador de su nieta desaparecida Clara Anahí Mariani. "Sabía que había sido entregada a una familia de Mercedes por un policía, jefe de la comisaría de esa ciudad, de nombre Norberto Avelino Jiménez. Era el padrino de la nena", aseguró Mariani.

La Abuela reseñó que el juez Durán se declaró incompetente, luego de dos meses de haber recibido la denuncia, y la remitió a su par de Mercedes.

Aquel magistrado, dijo Chorobik, ordenó el examen de ADN entre la familia Mariani y la niña. El resultado dio negativo. Pero la abogada de Chorobik, la hoy senadora Vilma Ibarra, solicitó que se compare el ADN con el de otros familiares de desaparecidos. En esa compulsa "la familia Ortolani no excluyó", dijo Chorobik, quien agregó que esa causa después fue seguida por las Abuelas de Plaza de Mayo.

La mujer recordó que el padre "adoptivo" de la niña declaró ante el juez que "cuando le dieron la beba también le ofrecieron un niño y no lo quiso". "Los repartían como gatitos", reflexionó Chorobik.



Participantes

De las audiencias de hoy participaron los jueces Julio Reboredo y Antonio Pacilio; el fiscal Carlos Dulau Dumm; el defensor ad hoc Carlos Cozzi; y la abogada de la APDH La Plata Alicia Peralta. 


  

 

Página Inicial del Juicio por la Verdad

Página Inicial del Sitio