Miércoles 10 de Noviembre de 2004

Informe de Prensa de la APDH La Plata - Juicio por la Verdad

Caso Mariani: se confirma que Clara Anahí fue sacada con vida de la casa de calle 30
Dos ex novias del policía Daniel Del Arco señalaron que la hija del matrimonio Mariani sobrevivió al operativo en el que murieron su madre y otras tres personas, en 1976. El caso seguirá investigándose el próximo 24.

Por F. Martínez, V. Wiman y Luz Zacconi (Secretaría de Prensa) 

LA PLATA (10nov04).- "Testigos que declararon hoy dicen que ella fue sacada en brazos de un policía. Quedó completamente probado que la nena sobrevivió y que fue sacada por un policía y entregada a Camps como yo había dicho en un principio", dijo María Isabel Chorobik de Mariani, Abuela de Clara Anahí, la bebé secuestrada de su casa de La Plata el 24 de noviembre de 1976, al final de una larga jornada de testimonios en la Cámara Federal.

El Tribunal trató hoy en el Juicio por la Verdad de averiguar qué pasó con esa niña, llevada de su casa cuando tenía tres meses, durante el operativo en el que fue asesinada su madre y otros tres compañeros de militancia. Seis testigos declararon sobre la posibilidad de que el hoy comisario inspector Daniel Del Arco esté involucrado en el caso.

Entre esos testigos, estuvieron dos ex novias del policía: Elena Nuñez y Patricia Domenici. Según relató "Chicha" Mariani, Nuñez fue novia de Del Arco en el momento en que se negoció con el policía, por intermedio de la famlia de la joven, el pago de un rescate por la niña secuestrada. Domenici, por su parte, fue pareja del policía en los '80, y en 1991 se presentó en Abuelas de Plaza de Mayo filial La Plata, en busca de "Chicha" Mariani.

El caso Mariani continuará investigándose el próximo 24 de noviembre, cuando se cumplan 28 años del ataque a la casa de calle 30 entre 55 y 56. En esa oportunidad testimoniará el propio Daniel Del Arco y el policía Gustavo Galella.

En busca de "Chicha" Mariani

En su testimonio, Patricia Domenici reconoció que fue a la sede de Abuelas porque sabía por comentarios que Del Arco salvó a la bebé, pero no aportó información sobre la fuente que le proporcionó ese dato.

En un primer momento, sostuvo que el objetivo de su visita fue pedir datos sobre el policía, no aportarlos. Según la mujer, en aquella época escuchó "comentarios" que involucraban a su ex pareja en la desaparición de Clara Anahí y entonces quiso averiguar si esto era cierto. "Lo que yo podía aportar no eran datos concretos. Yo fui a averiguar qué había pasado, si era cierto o no", manifestó.

A pesar de que Domenici no mostró mucha disposición para hacer memoria, su declaración sirvió de confirmación de la hipótesis de que la bebé fue sacada viva de la casa de sus padres después del ataque. Después de mucho insistir por parte de los jueces, la Fiscalía y los abogados, la testigo explicó en qué consistían los "comentarios" que escuchó: que Del Arco participó del ataque a la casa del matrimonio Teruggi-Mariani, que en el lugar había un bebé y que fue el policía "el que había salvado a la criatura".

Lo que Domenici no quiso contar fue de quiénes recibió esos rumores, reticencia que casi le valió una denuncia por falso testimonio. Se limitó a decir que eran "comentarios de todo el mundo".

Además, la Fiscalía y las partes pidieron un careo entre la testigo y Rosa Isabella Valenzi, la persona que la atendió en las dos ocasiones en que se presentó en Abuelas. Hoy, Isabella Valenzi declaró antes que Domenici y ratificó su declaración anterior en el Juicio por la Verdad -en mayo de 1999-, en la que había relatado los encuentros: dijo que Domenici se acercó en 1991 al organismo para aportar esos datos sobre Del Arco y pedir una entrevista con "Chicha" Mariani, no para solicitar información sobre él.

Durante el careo no se resolvió esta contradicción entre las dos testigos, pero Domenici empezó a ser más explícita en sus respuestas. De hecho, pese a que antes había dicho no recordar si preguntó por Mariani en sus visitas a la institución, después de escuchar a Rosa Isabella Valenzi admitió que quiso contactarse con la abuela de la bebé, pero que luego no lo hizo "porque tenía otros problemas de salud, personales, y no tenía nada más para aportar".

Hubo otros puntos que Domenici tampoco pudo explicar. En primer lugar, no supo responder por qué fue a Abuelas recién en 1991, si —según dijo hoy— los comentarios que involucraban a Del Arco los escuchó alrededor de 1987. Cuando se le preguntó si en el '91 obtuvo algún dato más sobre Del Arco que la llevara a querer contactarse con "Chicha" Mariani, Domenici sólo atinó a repetir las mismas frases: que nunca tuvo información puntual para aportar, que sólo escuchó "comentarios" y que no recuerda quién se los hizo.

Además, sus recuerdos de la visita a Abuelas no coinciden con el relato de Rosa Isabella Valenzi sobre los encuentros. Tanto en su testimonio de 1999 como en el de hoy, Isabella Valenzi afirmó que la ex mujer de Del Arco dio más datos sobre el policía, que en 1987 había declarado ante un juzgado provincial sobre el caso de Clara Anahí y había negado su participación.

"Hablaba mucho, siempre en contra del marido —rememoró Isabella Valenzi—. Su finalidad era contarle la verdad (a "Chicha" Mariani), que el marido había mentido".

Hacia el final de la audiencia, el juez Leopoldo Schiffrin se refirió a la reticencia de Domenici para testimoniar: "Lo que usted dijo es creíble. Lo que deja de decir es lo que deja un blanco, un vacío en su declaración".

La otra novia

Por su parte, Elena Beatriz Nuñez se distanció de Del Arco al indicar que su relación sentimental con el policía comenzó a resquebrajarse durante 1977, año en el que se produjo la negociación de la Abuela por el rescate de la bebé.

"Fuimos novios cuando éramos adolescentes, en el colegio secundario", dijo la testigo. Y agregó que en 1976 ella comenzó a cursar la carrera de Arquitectura, mientras Del Arco iniciaba sus estudios en la Escuela de Policía "Juan Vucetich". "Después nuestros caminos se bifurcaron", señaló.

Núñez remarcó que no estuvo al tanto de la negociación que se dio por medio de su tía, Elvira Molina, para la devolución de Clara Anahí. "No supe nunca nada", señaló.

También dijo que Del Arco comenzó a "investigar" el caso de la niña, pero que sus superiores "lo pararon", sin abundar en mayores datos. La mujer presentó así a Del Arco como una persona que ayudó en la búsqueda y no alguien que mandó a pedir dinero a cambio de la niña.

"No sé si (Del Arco) participaba en operativos" represivos, señaló Núñez. "Las veces que le pregunté algo a él, no me dio respuestas. Él me decía: «Es mejor no saber»".

Señaló además que durante 1976 advirtió un "cambio de carácter" en Del Arco y que en una oportunidad se lo encontró en la Facultad de Arquitectura (que cuenta con más de 100 desaparecidos), vestido de civil, sin que le diera explicaciones del motivo. En ese entonces, Del Arco estaba haciendo un Curso de Inteligencia en la Policía.

Nuñez también indicó que en su familia, a partir de los relatos de los Mariani, se comentaba que no había elementos para indicar que Clara Anahí estaba muerta.

El testimonio de la Abuela

La primer testigo en declarar hoy fue María Isabel Chorobik de Mariani ("Chicha"), la Abuela de Clara Anahí. La mujer definió a esta investigación como "una de las partes más importantes de mi búsqueda".

Chorobik comenzó contando la relación de su familia con el matrimonio compuesto por Omar Cerruti y Elvira Molina. El marido de "Chicha", Enrique José Mariani, conocía a Cerruti por su profesión de músico.

"La familia Cerruti se acercó a mí cuando pasó ese atroz desastre de la casa de mi hijo. Yo me acerqué más. Su casa era un lugar adónde yo podía ir a llorar", evocó la testigo.

Indicó que un día de 1977, Elvira Molina la convocó a su casa y le contó que la familia se reunía con Elena y con el novio de ésta, que era policía. "Siempre que lloraban este hombre se sonreía y hacía muecas. Entonces le preguntaron porqué tenía esos gestos y él contestó: «Cómo no me voy a reir si la están llorando y está viva»", señaló Chorobik

Fue entonces que, en su desesperación, la Abuela ofreció dinero e incluso todos sus bienes a cambio de la entrega de la niña. Siempre por medio de la familia Cerruti-Molina, Chorobik negoció la devolución de Clara Anahí "a contra entrega" de todo lo que tenía, y con la condición de que abandonara el país.

"Yo entonces estaba sola. Mi marido estaba en Italia y todavía no me había reunido con las primeras Abuelas", recordó "Chicha".
Para poder salir del país en forma segura, Chorobik consultó al cónsul de Italia en La Plata, Luiggi Di Vita. Toda la familia Mariani tenía esa nacionalidad. "Me ofreció cuidar a mis padres y sacarme en un auto de la embajada. Yo pensaba que el cielo se abría para mí". Esto fue en septiembre de 1977.

Pero el plan se abortó porque el cónsul fue a ver al Jefe de Policía, el coronel Ramón Camps. Al día siguiente, Di Vita le "reprochó" a la Abuela de Clara Anahí porque le había "mentido". "Camps le dijo que mi hijo, que había muerto hacía un mes, quería chantajearme para que Montoneros se quedara con el dinero", contó la testigo.

La misma repercusión se produjo en la casa de la familia Cerruti. "Ellos estaban pálidos y decían que ahora perseguían a ese policía, que había pasado la noche durmiendo en un auto. Parece mentira pero yo me preocupé por ese policía. Me dijeron que no contara más con la ayuda de ellos".

Fue recién en 1984 que Omar Cerutti le dijo a María Isabel Chorobik que el policía en cuestión era Daniel Del Arco. "Yo declaré en el Juicio a las Juntas y di todos los nombres. Después me encontré con Elvira y le anuncié que la iban a citar. Se asustó mucho, al punto que yo le pregunté si todo no era una estafa suya. Pidió que no la citaran porque creía que le iban a matar a sus hijos. Se arrodilló y me besó los pies".

La Abuela de Clara Anahí se encontró con Del Arco por primera vez en el juzgado de Antonio Borrás, quien llevó adelante una causa iniciada por las Abuelas de Plaza de Mayo, a partir de una denuncia colectiva.

"Él negó todo —recordó hoy "Chicha"—. Transpiró toda su camisa; era agua. Cerruti también negó todo y dio a entender que yo estaba trastornada".

Elvira Molina nunca declaró y murió años después en un accidente de tránsito: su auto se fue a un zanjón en la ruta 2, que une Buenos Aires con Mar del Plata.

María Isabel Chorobik indicó que la familia Cerruti-Molina "tenía mucho miedo" y que entendía que era un miedo "real". Señaló que ellos le contaron que Del Arco trabajaba "matando y capturando gente", en la órbita del COT (Comando de Operaciones Tácticas). También, según el relato de la Abuela, Del Arco "estaba amargado porque se le había muerto una chica rubiecita, linda, en la tortura".

La testigo indicó además que Patricia Domeneci, la novia del policía en los '80, "ha vivido escondida y aterrorizada".

También habló del comisario Mario Pacheco: a "Chicha" le llegó la información que tuvo a la nena durante una semana o diez días. "La mujer se asustó y la devolvió", declaró la Abuela, e indicó que no podía decir quién le había dado ese dato, que consta entre sus registros.

Falso testimonio para el policía Galella

El subcomisario Gustavo Federico Guillermo Galella fue denunciado por el Tribunal ante la fiscalía por el presunto delito de falso testimonio.

El policía no pudo explicar la relación que ya había hecho en la audiencia del 17 de octubre, en la que vinculó a la entonces novia de Del Arco, Elena Núñez, con la desaparición de Clara Anahí Mariani. Hace 14 días había dado el nombre de Elena espontáneamente, sin que nadie le hubiera preguntado por ella. "Ubiqué la figura de Elena como alguien que podía aclarar la situación", dijo el subcomisario, pero no explicó el por qué.

Al no brindar una explicación convincente en su testimonio, el Tribunal consideró que Gallela ocultó información y por eso lo denunció ante la Unidad Fiscal, que ahora deberá impulsar una denuncia penal en primera instancia. El juez Leopoldo Schiffrin le expresó que "alrededor de la causa había un muro de silencio, que funcionaba como una omertá corporativa".

Galella reiteró una vez más que se enteró de los hechos ocurridos en la casa Teruggi-Mariani por los medios gráficos y que Del Arco "nunca me hizo ninguna pregunta acerca de los hechos ocurridos en la calle 30, el 24 de noviembre de 1976. La orientación de la época era no intervenir en fases operativas o represivas. Esa era la norma. No recuerdo excepciones", argumentó.

Durante el testimonio del policía, el abogado de Mariani, Juan María Ramos Padilla, solicitó al Tribunal que Galella saliera de la sala para pedir la inmediata comparecencia de Del Arco. El público presente se sumó al pedido y algunos concurrentes se pararon, hicieron gestos y pidieron la citación en ese momento. La Fiscalía adhirió y el Tribunal se comunicó rápidamente con el Ministerio de Seguridad para que se ordenara al policía, actualmente en actividad, a presentarse en el juicio. En poco menos de una hora, Del Arco arribó a los Tribunales. Finalmente no se le tomó declaración y se le fijó audiencia, junto con Galella, para el 24 de noviembre próximo, fecha que coincide con el ataque a la casa de la calle 30.

Apareció un familiar

María Isabel Chorobik de Mariani reveló hoy que por primera vez en 28 años pudo contactarse con un familiar de Juan Carlos Peiris, uno de los asesinados en el ataque a la casa de su hijo. Por medio de un afiche de la Asociación Anahí, Jorge Peiris, el hermano de la víctimaque actualmente vive aislado en un campo de Río Negro, se enteró del destino de su ser querido. Este familiar declarará también el próximo 24.

Participantes

De las audiencias de hoy participaron los jueces Leopoldo Schiffrin y Julio Reboredo; en representación del Ministerio Público Fiscal, Carlos Dulau Dumm y Hernán Schapiro; el defensor ad hoc Jorge Cozzi; los abogados de la APDH La Plata Jaime Glüzmann y Alicia Peralta; y los letrados Juan María y Alejo Ramos Padilla, en representación de la Abuela María Isabel Chorobik de Mariani.