Miércoles 9 de Noviembre de 2005

Juicio por la Verdad (La Plata)

 

 

Secuestros en cadena digitados desde La Plata.
Lidia Araceli Gutiérrez relató cómo un grupo de tareas perteneciente a la Policía Bonaerense, secuestró a varios de los integrantes de su familia en diferentes puntos de la provincia. El testimonio refleja una faceta más del modus operandi de las patotas durante la dictadura cívico militar.


Por Secretaría de Prensa APDH La Plata

 

LA PLATA (9nov2005).- La Cámara Federal de Apelaciones de La Plata, en el marco de los Juicios por la Verdad, trató hoy el caso de Juan Carlos Ledesma y Amelia Isabel Gutiérrez, matrimonio detenido y desaparecido desde 1977.

La testigo Lidia Araceli Gutiérrez, hermana de Isabel, narró los pormenores de un caso que describe el modus operandi de las fuerzas represivas durante la última dictadura cívico militar. En diferetes puntos de la Provincia de Buenos Aires fueron secuestrados, casi simultáneamente, cinco miembros de la misma familia; para luego ser trasladados a distintos centros clandestinos de detención y a unidades penales de la provincia y Capital Federal.

Según la testigo, el 13 de septiembre fue secuestrado en Tandil Francisco Nicolás Gutiérrez, padre de Amelia Isabel y Lidia Araceli, quién además se desempeñaba como oficial de policía en esa ciudad.

El mismo día, un comando de las fuerzas de seguridad al mando de quien se identificara como Coronel Bergel estuvo en casa de la testigo –quién por entonces residía en Olavarría- preguntando por Amelia Isabel. Entre el 14 y 15 de septiembre de 1977, Juan Carlos Ledesma y Amelia Isabel Gutiérrez fueron secuestrados en esa ciudad, por una patota de civil, presumiblemente de la ciudad de La Plata.

Lidia Gutiérrez fue secuestrada junto a su marido Néstor Elizari –quién también declaró hoy como testigo- por la misma patota que comandaba el Coronel Bergel el día 16 de septiembre de 1977 en la misma ciudad.

Todos ellos, una vez secuestrados, fueron trasladados a la Brigada de Investigaciones de la Ciudad de Las Flores – identificada por la testigo como Brigada de Cuatrerismo-. Allí los integrantes de la familia la familia, junto con otros detenidos, son sometidos a interrogatorios bajo tortura.

Luego los dividen en dos grupos. Uno fue trasladado a la Brigada de Investigaciones de La Plata (55 e/13 y 14), y el otro grupo al Centro Clandestino de Detención conocido como Monte Peloni (Olavarría), entonces bajo la responsabilidad del Coronel Ignacio Aníbal Verdura (Jefe del Regimiento de Caballería II de Olavarría), y subordinado directo de Alfredo Oscar Saint Jean (Comandante de la Brigada de Caballería Blindada I correspondiente a la Sub-zona 12).

Juan Carlos Ledesma, Amelia Isabel Gutiérrez, y Francisco N. Gutiérrez estuvieron en la Brigada de Investigaciones. Amelia compartió la celda hasta el 24 de diciembre de 1977, fecha en la que fue trasladada. Su padre fue liberado en febrero de 1978 cerca de Brandsen, Provincia de Buenos Aires. El matrimonio Ledesma – Gutierrez continúa desaparecido desde entonces.

A su vez, en noviembre de 1977, Lidia Araceli Gutiérrez y Néstor Elizari serían trasladados y a la Unidad Penal de Azul y "blanqueados". A partir de allí, Lidia Gutiérrez sería trasladada en febrero de 1978 al penal de Villa Devoto y liberada bajo “Libertad Vigilada” el 20 de julio de 1979. Su marido Néstor Elizari es trasladado a la Unidad N° 9 de La Plata en los primeros meses de 1979.
Es importante destacar que Marta Susana Gutiérrez –hija de Francisco Nicolás- se entrevistó con el Coronel Reynaldo Tabernero mientras buscaba a su familia. Según la testigo, Tabernero dijo que “el petiso –en relación a Francisco Gutiérrez- va a salir”.

Tabernero a su vez, habría estado presente en la Brigada de Investigaciones de La Plata el 24 de diciembre de 1977, fecha en la que trasladan a Isabel.

Reynaldo Tabernero, por entonces Subjefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, actualmente se encuentra detenido y procesado en la causa que investiga los delitos cometidos en la Comisaría 5° de La Plata.

Por otra parte, a raíz de su detención en el centro Clandestino de “Monte Peloni”, Lidia Gutiérrez logró identificar al Sargento Carlos Alberto Muñoz (Chacho) y a Omar Ferreyra (Pájaro); este último Director del Área de Control Urbano del Partido de Olavarría, en la actualidad.

 

Pozo de Banfield

Otro de los testigos que declararon en la jornada fue Víctor Hugo López, por la Causa Alfredo Narciso Agüero. En el marco de esta causa la Cámara Federal de Apelaciones viene citando a los efectivos que cumplían funciones en la dependencia policial donde funcionara el Centro Clandestino de detención conocido como “Pozo de Banfield”.

López prestó servicios allí desde el año 74 hasta el 79 como cocinero de la dependencia. En su declaración el testigo no pudo recordar a ningún compañero con los que compartiera tareas en todos esos años, y dijo desconocer la existencia de detenidos ilegales en el lugar, aduciendo “bloqueos” a causa de un mal psiquiátrico que lo llevara al retiro de la fuerza y su posterior jubilación.

 

Participantes

De las audiencias de hoy participaron los jueces Leopoldo Schiffrin y Julio Reboredo; el fiscal federal Carlos Dulau Dumm; la abogada de la APDH La Plata, Alicia Peralta y Emanuel Lovelli, en representación de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo.
 


  

 

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