El Profesor Alfredo Bravo

 

De notoriedad en el ámbito sindical, revistaba como Secretario General de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), uno de los gremios más representativos en el país y Co-presidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos.

Aprehendido ilegalmente en la escuela donde se encontraba dictando clases, el 8 de septiembre de 1977, a partir de ese momento fue reiteradamente golpeado y variadamente torturado para que respondiera a preguntas sobre cada una de las organizaciones que dirigía. Posteriormente «legalizado», fue encarcelado como sometido al régimen del Estado de Sitio, que más tarde continuó bajo la forma de libertad vigilada luego del 16 de junio de 1978, durante este periplo perdió 25 kilos de peso.

El 2 de febrero de 1984, el Profesor Alfredo Bravo compareció ante el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas. Algunas de las declaraciones vertidas en dicha oponunidad revelan lo siguiente:

«También recuerdo que en la conversación mantenida con dicho señor (Cnel. Camps), este me manifestó que pesaban sobre mi persona graves cargos, que me hallaba muy comprometido, que en las próximas horas iba a tener contacto con mis familiares y que si contaba lo que me había pasado, me iba a suicidar en la celda... Le respondí entonces que yo no pensaba suicidarme, lo cual le molestó y lanzó una serie de amenazas e improperios para terminar reinterándome lo del suicidio... A las sesiones de tortura llegaba desnudo con los ojos tabicados y la capucha puesta».

En una nota emitida por el gobierno argentino, con fecha 21 de diciernbre de 1978, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, se expresa entre otras cosas: «El Gobierno argentino niega que la actividad seguida con el Sr. Alfredo Bravo configure violación alguna de los derechos humanos, sino que se halla encuadrada dentro de los p rocedimientos legales vigentes».

 

Ir al tema siguiente: H. Represores y esquemas represivos

 

Volver al índice