¿Un insulto al Ejército Argentino?
Apéndice

El Escuadrón Perdido, por José Luis D'Andrea Mohr.
  
 


Buenos Aires, 14 de septiembre de 1985

Señor
Jefe del Estado Mayor General del Ejército
General de Brigada D. HECTOR RIOS EREÑU
S/D

De mi mayor consideración.

Cumplo con un ineludible deber de conciencia al dirigirle esta carta con el objeto de poner en su conocimiento de un hecho que considero tan inaudito como avergonzante, cometido por un oficial retirado del Ejército.

En efecto, en el día de la fecha en el programa "CABLE A TIERRA" que se transmitió por el Canal 7 de TV a las 21:00 horas, se debatió el tema del SERVICIO MILITAR OBLIGATORIO. En el mismo fue entrevistado el Capitán (R) FEDERICO MlTTELBACH, quien vertió conceptos agraviantes hacia la Fuerza, señalando que el SMO no servía para nada y que debía ser abolido, así como otras expresiones poco menos que insultantes para el Ejército Argentino, al que muy orgullosamente pertenecemos.

Juntamente con el causante, señaló idénticos conceptos el ex Coronel CESIO, de quien la Institución y sus miembros poseen sobrados antecedentes.

El programa de marras es una evidente afrenta a la Fuerza, en el cual aprovechan para explicitar sus ideas los ideólogos izquierdistas que pretenden menoscabar y en definitiva destruir los sólidos cimientos del Ejército Argentino.

Como esta situación la considero poco menos que humillante para el Ejército, es que solicito de Ud. se adopten las medidas que estime corresponder al efecto.

Sin otro particular, lo saluda muy atentamente

MARIO OSCAR DAVICO
General de Brigada (R)




Reproducción textual del total de las expresiones vertidas por el capitan Federico Mittelbach en el programa Cable a tierra, transmitido por ATC el 14 de septiembre de 1985 a las 21:00 horas, segun tape N° 60-695 de su archivo. Su intervención se prolongó durante cuarenta y cinco segundos y en ella hace alusión al autoritarismo.

-Quiero aclarar que, necesariamente, el orden militar es autoritario, en cuanto ejercicio de la autoridad. Unos, mandan sobre otros.

-Por lo tanto: ¿para qué sirve [el servicio militar obligatorio]?
-Yo creo que no sirve...

-O sea que usted está, ¿por qué opción en cuanto al servicio militar obligatorio?
-Yo estoy por la única opción: que la Argentina, por sí, se plantee si existe alguna hipótesis de conflicto. A partir de esta hipótesis -si es que ésta existe-, diga qué Fuerzas Armadas se necesitan y, a partir de ese hecho, tener un ejército voluntario (oficiales y suboficiales son voluntarios). No creo en la necesidad del servicio militar obligatorio, que sí cumplió una función a principios de siglo, cuando la Ley Ricchieri. Bueno... pero sería entrar en un tema más extenso...

 


ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJERCITO
SECR. AYTE. JEMGE


MEMORANDUM

Buenos Aires, 18 de setiembre de 1985

AL SUBJEFE DEL ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJERCITO (AJE)

POR RESOLUCION DEL SEÑOR JEFE DEL ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJERCITO; adjunto elevo al señor Subjefe nota de fecha 14 Set 85, cursada por el Grl Br (R) D MARIO OSCAR DAVICO, en la que hace referencia al comportamiento del Cap (R) FEDERICO MITTELBACH en un programa televisivo, donde se debatió el tema del Servicio Militar Obligatorio, vertiendo conceptos agraviantes hacia la Fuerza.

AGREGADOS: Lo expresado en el texto.

HECTOR LUSIN ARIAS 
Coronel
Secretario Ayudante del Señor Jefe
del Estado Mayor General del Ejército




Buenos Aires, 28 de octubre de 1985

Objeto: denunciar la apocrificidad de una "carta" atribuida a un oficial superior.

AL JEFE DEL ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJERCITO

Por nota "CONFIDENCIAL" A W S 9000/34, de fecha 08 Oct 85 se ordenó mi presentación "URGENTE" a la AYUDANTIA GENERAL - DEPARTAMENTO MANTENIMIENTO DE LA MORAL Y DiSCIPLINA, la que hice efectiva en fecha 101030 Oct. En dicha oportunidad, el Sr Tcnl. D EDUARDO E. ASCHERI, me notificó de una supuesta denuncia que, por medio de una "carta" que tuve a mi vista, habría efectuado el Sr Grl Br D MARIO OSCAR DAVICO, con motivo de mi participación en un programa televisivo. Dadas las, a simple vista, garrafales fallas formales que la misma presentaba y en consideración a las canallescas acusaciones que allí se hacían, solicité por escrito se me facilitara una fotocopia de la insólita misiva (solicitud que no ha sido satisfecha hasta el presente). Ambas razones me permiten afirmar, respetuosamente, con sobrados motivos que paso a puntualizar, que estoy persuadido de su inautenticidad. Antes bien, afirmo que esa "carta" jamás pudo haber sido escrita por un señor general que, a mayor abundamiento, pertenece a mi misma promoción y arma.

Las probanzas a que hago alusión, pueden agruparse en los tres aspectos siguientes, a saber:

1. Formales.
2. De contenido.
3. Eticos.

1. Aspectos formales

Basta observar lo que el propio autor -o autora- define como "carta" (primer párrafo, segunda línea de la despreciable delación), para advertir que es imposible que pueda haber sido confeccionada, no ya por un oficial superior, sino por el menos aventajado aspirante del primer año de la ESCUELA DE SUBOFICIALES "SARGENTO CABRAL". Y lo afirmo en razón que:

a. La "carta" no existe como forma de correspondencia militar, como puede verificarse en el Reglamento de Servicio Interno (RV -200 - 10) - Sección II - Formas de Correspondencia - N2 22.008, incisos 1) a 6) (páginas 160 y 161). Tampoco se menciona este original, cuan gentil, medio de comunicación castrense en el Reglamento de Escritura en Campaña (RC - 65 - 100) - Capítulo 1 - Normas Militares de la Escritura - N2 1.001, inciso 1) - La comunicación escrita (segundo párrafo; página 1).

b. En rigor, en el vocabulario militar, la expresión "carta" es utilizada en el Reglamento de Terminología de Uso Castrense en las Fuerzas Terrestres (RV 136 - 1) y así definida: "Representación gráfica, a escala, de una porción del terreno sobre una superficie plana. Se clasifican según su escala, la extensión que abarcan, su empleo desde el punto de vista militar, etc." (página N' 73). El documento que tuve a mi vista no tiene el menor aspecto de poder ser confundido con lo que, según esta definición, los militares -desde siempre- hemos entendido por carta.

e. No solamente en mi opinión sino en la de distinguidos oficiales superiores a quienes he consultado, nos encontramos en presencia indubitable de un documento no-militar. No menos prestigiosos docentes de academias especializadas coinciden con rara unanimidad que, aunque deplorablemente redactada, se trata de una carta comercial. Veamos si no:

1) La dirección de la correspondencia -aunque con alguna desprolijidad en la distribución de la letra "D" de la cuarta línea que debió alinearse a la misma altura que la "o" final de Ejército, de la línea segunda- (según las reglas de escritura comercial, claro), así lo demuestra: un cabo recién egresado sabe que el N' 22.002 del Reglamento de Servicio Interno, ya citado, determina que: "La dirección de la correspondencia será impersonal, debiendo figurar la designación del cargo". Ello, sin considerar que, ignorante como es quien la mal escribiera, ha omitido -entre otras cosas- colocar el Objeto determinado en el inciso 6) del Nº 22.057 del reglamento y que ha prescindido, en su descomunal torpeza, colocar con mayúsculas el cargo de JEFE DEL ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJERCITO, según lo establece el N' 22.068, inciso 2) y que, para mejor aclaración, se ejemplifica en el Anexo 22 (art. 22.009-3; 22.018 y 22.068).

2) La "carta" está encabezada con la gentil expresión "De mi mayor consideración", haciendo olímpica inadvertencia de lo determinado en los párrafos 52º y 6º del inciso 1) del Nº 22.057.

3) El saludo final, no menos galante, expresa: "Sin otro particular, lo saluda muy atentamente" (eso sí carente de punto final o dos puntos, una cuestión sobre la que no se terminan de poner de acuerdo las mejores academias especializadas).

4) En el párrafo quinto, ante lo que considera una situación "poco menos que humillante", el autor -o la autora- de la "carta" solicita, en el mejor estilo burócrata, que no en el de un hombre de honor, se adopten las medidas que estime corresponder al efecto. El más moderno de los subtenientes, es decir, el último de camada de la promoción egresada en 1984, está insoslayablemente obligado a saber que, dada la gravedad de los hechos denunciados, hubiera redactado su requerimiento en los términos siguientes: "En cumplimiento de lo determinado en el Reglamento de los Tribunales de Honor de las Fuerzas Armadas en su número 108, inciso l), solicito que se considere la designación de la Comisión de Honor del caso". Y, a renglón seguido: "Asimismo, informo haber dado cumplimiento a lo establecido en su Nº 107 - Obligación de prevenir al camarada".


Por todo lo expuesto, en cuanto a los aspectos formales -que, por razones de brevedad, no han sido agotados exhaustivamente-, y descartado de plano que la "carta" en cuestión sea autoría del señor oficial superior cuyo nombre figura al pie de la misma, sugiero se investigue entre las alumnas del primer curso de las academias de enseñanza comercial, como una pista valedera para desentrañar esta burda tentativa de involucrar en una actitud a todas luces indigna, al Sr Gr1 Br (R) D MARIO OSCAR DAVICO (Pitman y Speedwriting, son las dos únicas que figuran en el Tomo Comercial y Turístico de la Guía Telefónica de la Ciudad de Buenos Aires y Alrededores - Edición 1984 - pág. 60, col l).



2. Aspectos de contenido

La calumniosa misiva, en lo que hace a este segundo aspecto, ratifica plenamente su condición de patraña, por su lenguaje ramplón, que suele ser característico de las denuncias anónimas o de los libelos propios de cobardes. En efecto, agotada -en el más benévolo de los casos- en un subjetivismo que sólo puede atribuirse a la más cerrada ignorancia, la torpeza mental o la decadencia senil, no contiene una sola prueba objetiva que, recién allí, hubiera dado razón a sus dichos. Dichos, por otra parte, que pueden figurar en la mejor antología de las vírgenes iracundas más célebres de la historia (y de la histeria). Ello, sin considerar (y esto sería, acaso, incurrir en subjetivismo de mi parte) que quien sea autor -o autora- de la estilísticamente mediocre epístola comercial, pueda haber tenido la intención de agraviarme gratuitamente y así enfrentarme con mi antiguo compañero de promoción, el distinguidísimo señor general.

El mismo subteniente al que alegóricamente hacíamos alusión, antes de elevar tamaña denuncia a la superioridad, hubiera procedido de la manera siguiente:

a. Dirigirse a ATC - Televisora Color (Av Figueroa Alcorta 2977, de Capital Federal) y solicitar la cinta de video que se conserva en el archivo.

b. Ver la cinta, cuantas veces fuera necesario, para de allí extraer las expresiones textuales vertidas por mí.
c. Solicitar a las autoridades del canal o mediante escribano público, la certificación correspondiente.

d. Haber adjuntado a su "carta" al Sr JEMGE, como prueba inapelable, este documento.
Esto es precisamente lo que he hecho yo. Tengo en mi poder el documento que acredita mis dichos textuales, extraídos del "tape" N2 60695 que, para mayor abundamiento, he solicitado a las autoridades de ATC, no sea borrado (supuesto el caso -que desdeño por desdeñar terminantemente la autoría atribuida- el Sr JEMGE considerara necesario consultar).


3. Aspectos éticos

Sin perjuicio de lo anticipado en 1. b 4), y en el propósito de demostrar la malévola intención de involucrar al Sr Grl Br (R) D MARIO OSCAR DAVICO, en actitud propia de delincuentes subversivos (DDSS), inspirada -qué duda cabe- "por los ideólogos izquierdistas que pretenden menoscabar y en definitiva destruir los sólidos cimientos del Ejército Argentino" (sic), en una de las más enjundiosas manifestaciones del peor gusto y la cursilería propia de quienes carecen de valentía para llamarse soldados, y que, según el autor -o la autora- de la deplorable "carta" se me atribuye, es que paso a describir las que habrían sido groseras violaciones a la ética, de haber sido cierta la autoría atribuida al, desde cadete, distinguidísimo señor general de la nación a quien se adjudica la misiva.

Un hecho considerado "tan inaudito (sic) como avergonzante", que habría sido cometido por quien vertió "conceptos agraviantes para la Fuerza" (así, como si el honor pudiera ser despersonalizado para diluirlo en el ancho campo de "la Fuerza"). Y "expresiones poco menos (¡sic!) que insultantes para el Ejército Argentino", lo (o la) habría obligado a dar los siguientes pasos:

a. Prevenir al camarada (supuesto que lo hubiera sido), según los términos del N- 107 del Reglamento de Tribunales de Honor que, en lo que a mí respecta, conozco desde los dieciséis años, siendo cadete del Curso Preparatorio del COLEGIO MILITAR DE LA NACION.

b. Solicitar el pedido de actuación de un Tribunal de Honor, en los términos establecidos en el Nº 103, haciendo mención a las transgresiones al honor que el -o la- denunciante consideraba estar yo incurso (Nº incisos 1 al 16, del citado reglamento).


Mi general (permítame usted la digresión que sé no es reglamentaria, pero que, ante su honor herido, hubiera sido también inevitable): El "último tambor del Ejército" -como hubiera dicho el general San Martín- posee más honor que el autor -o la autora- de la infamia que denuncio.

Por tanto, y en el entendimiento de haber demostrado la apocrificidad de la "carta" comercial que motiva las presentes actuaciones, es que solicito -al solo efecto de responder a aspectos formales de las mismas-, se requiera al Sr Gr1 Br (R) D MARIO OSCAR DAVICO, ratifique, o no, la autoría de la misma.

FEDERICO E. MITTELBACH
Capitán de Caballería (R)




Buenos Aires, 5 de noviembre de 1985

Objeto: Solicitar se considere la designación de una Comisión de Honor.
AL SR JEFE DEL ESTADO MAYOR GENERAL DEL EJERCITO

En cumplimiento de lo determinado en el Nº 108. inc 1) del Reglamento de los Tribunales de Honor de las Fuerzas Armadas, solicito a usted se considere la designación de la Comisión de Honor del caso, en razón de considerar:

1. Lesivos para mi honor

Los términos contenidos en la "carta" -según su autor califica a esta inusual forma militar de correspondencia-, que dirigiera a usted el Sr Grl Br (R) D MARIO OSCAR DAVICO con fecha 14 Sep 85 (de la cual se me ha ratificado su autoría recién el día de hoy, en el propio EMGE), con motivo de mi participación en una encuesta televisiva, por considerarlo incurso en el art 103. incisos 3); 4); 5) y 8), del mismo reglamento.

2. Lesivos para el honor del señor general

El no haber dado cumplimiento a lo establecido en los artículos 103. inc 6); 107. y 108. inc l).
Asimismo, pongo en su conocimiento que, en la fecha, por pieza postal certificada "con aviso de retorno", he dado cumplimiento a lo establecido en el N" 107, mediante nota dirigida al Sr Grl Br (R) D MARIO OSCAR DAVICO y haber hecho la regla de valoración del honor que hace referencia el Nº 104.

FEDERICO EDUARDO MITTELBACH 
Capitán de Caballería (R)



Buenos Aires, 5 de noviembre de 1985

Objeto: prevenir a un camarada haber solicitado la designación de una Comisión de Honor.

AL SR GRL BR (R) D MARIO OSCAR DAVICO

En cumplimiento de lo determinado en el N9 107 del Reglamento de los Tribunales de Honor de las Fuerzas Armadas (Obligación de prevenir al camarada), hago saber a usted que, según lo dispuesto en el N° 108. inc. 1) del citado reglamento, en la fecha, he solicitado al Sr JEMGE considere la designación de la Comisión de Honor del caso, en razón de considerar:

1. Lesivos para mi honor

Los términos contenidos en la "carta" -según usted mismo califica a su inusual forma militar de correspondencia-, que dirigiera al Sr JEMGE, con fecha 14 Sep 85 (de la cual se me ha ratificado su autoría recién el día de hoy, en el propio EMGE), con motivo,de mi participación en una encuesta televisiva, por considerarlo a usted incurso en el art 103, incisos 3); « 5) y 8), del mismo reglamento.

2. Lesivos para su propio honor

El no haber dado cumplimiento a lo establecido en los artículos 103. inc 6); 107. y 108. inc. l).
Asimismo, pongo en su conocimiento que en la solicitud efectuada al SR JEMGE, remitida por pieza certificada "con aviso de retorno", he dado cumplimiento a lo establecido en el N' 104 (Regla de valoración del honor).

FEDERICO EDUARDO MITTELBACH 
Capitán de Caballería (R)


 

Indice General de El Escuadrón Perdido